El pez dorado es especialmente popular en los países asiáticos, por dicho motivo también es llamado popularmente como el pez chino. En China es muy común colocar acuarios poblados de peces de colores, creen que contribuyen a la prosperidad y la felicidad de la familia y que protegen contra los accidentes.
Además, para los chinos, los peces dorados son un signo que atrae la riqueza y una feliz unión.
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¿Por qué comprar el pez chino de la suerte?
Los peces dorados son una parte importante del budismo, originalmente personificaban los dos principales ríos hindús: el Ganges y el Yamuna. Asimismo, formaban parte de los ocho símbolos propicios y se decía que los ojos de Buda eran comparables con dos peces de colores.
En China, a los peces chinos de la suerte se les conoce como peces feng shui. Así, en el Feng Shui, los peces y los acuarios que los contienen se relacionan con la energía del agua y aportan fluidez y tranquilidad. En concreto, hoy te hablaremos del pez chino Koi, más conocido como el pez de la abundancia. Es un pez muy parecido a las carpas y tiene una gran variedad de tonalidades de distintos colores. Se le considera como un símbolo atrayente de abundancia y riqueza, lo que hace que sea de suma importancia para toda la sociedad china.
En determinados casos existe la creencia de que los peces dan mala suerte o son de mala suerte. Nada más lejos de la realidad. Este pensamiento negativo sobre los peces dorados tiene su origen en varias creencias, entre la que destaca la siguiente:
En la antigua China eran comunes los concursos de peces. Aunque resulte curioso, los ciudadanos chinos ricos nunca ganaban estos concursos y, envidiosos por la situación, hicieron creer a los pobres que la causa de su pobreza residía precisamente en los peces que criaban. De esta manera evitaron que los pobres siguieran participando en los concursos para poder ser ellos quienes los ganaran.
Por tanto, esta leyenda que cuenta que los peces dan mala suerte tiene su origen en la envidia humana, ¿qué mala es la envidia verdad? No te dejes engañar por las malas lenguas, los peces son de buena suerte.
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¡Suerte y feliz compra!